La falsa neutralidad de la red

Es el principio que permite regular los contenidos de Internet. El Estado debe garantizar, a través de políticas públicas y de leyes, el acceso igualitario de la información y la no discriminación entre las personas. 

Si bien en un primer momento el acceso a internet era neutral, hoy ya no es así ya que hay una lucha de intereses políticos y económicos por conseguir y mantener el monopolio de la información. En el caso de Argentina, a pesar de que se presentaron 14 proyectos para regular la Red, sólo se sancionó la  Ley Argentina Digital y se aprobaron dos artículos

Con respecto a la creación de una normativa para la regulación o no de la neutralidad de la red, aparecen dos posturas. Por un lado,  la aperturista defiende que exista un marco legal, en tanto que la desrregulacionista, sostiene que Internet va a ser mejor cuanto más administrado esté por sus dueños.  Si hay una regulación no va existir el negocio. Los productores de servicios de Internet son uno de los actores que no quieren que se regule, mientras que los proveedores de contenidos sí están a favor de garantizar la igualdad de condiciones.

Sin embargo, en la realidad existen oligopolios que concentran el acceso a la información. Entonces, hay una desigualdad entre las personas dado que no todos tienen acceso a Internet, un 57% de la población mundial no tiene conexión a Internet.  La información no circula en términos de igualdad, no se respetan  los derechos de las personas ni la libertad de expresión. ¿Qué libertad de expresión puede haber si sólo unos pocos son los dueños de los medios que nos proveen los servicios que utilizamos diariamente?

Actualmente, se habla de un neo-imperialismo tecnológico, es decir, grandes empresas con gran poder concentrado como Facebook, Amazon, Google, Microsoft y Apple, llamados “El Club de los Cinco”, que en un contexto neoliberal se expandieron por todo el planeta y dominan el mundo de Internet y los contenidos que circulan en el.

Algo parecido sucede en Argentina con el Grupo Clarín y Mercado Libre, grandes plataformas tecnológicas que controlan los derechos de las personas y su acceso a la Red. Estas empresas, no sólo manejan el universo de lo digital, sino que están conquistando otras industrias, como el transporte, el entretenimiento, etc.

Por lo tanto, no se puede hablar de una Red  neutral ya que hay mucha desigualdad entre las personas para acceder a ella. La solución se encuentra en el Estado, quien debe implementar políticas públicas que garanticen que todas las personas tengan los mismos derechos a la hora de usar Internet.

En nuestro país, las investigaciones en Ciencia y Tecnología no están financiadas, a diferencia de lo que sucede en otros países donde el Estado sí proporciona dinero a distintas empresas para progresar como país y que la sociedad pueda vivir dignamente. Al mismo tiempo, esto produjo que pocas empresas concentren mucho capital financiero y sean líderes de Internet, provocando más desigualdades entre las personas.